La ciudad de Marbella ha reabierto al tráfico el túnel de Puerto Banús, una vía crucial que atraviesa la calle Juan Belmonte bajo la A-7. Esta reapertura se produce tras la finalización de una serie de obras destinadas a prevenir inundaciones en la zona durante las lluvias. El concejal de Obras, Diego López, ha destacado que estas mejoras son parte de un esfuerzo más amplio para solucionar un problema recurrente que afectaba a la ciudad cada vez que se presentaban lluvias intensas.
La obra ha incluido la instalación de un tanque de tormenta con capacidad para 60,000 litros, equipado con dos motores que permiten vaciarlo cada nueve minutos. Esta infraestructura es clave para gestionar el agua de lluvia y evitar que el túnel se inunde, lo que ha sido un problema endémico en la zona. Además, se han realizado trabajos de saneamiento, así como la reparación de la calzada y las aceras.
López ha explicado que, aunque el tráfico ha sido reabierto en ambos sentidos, existen ciertas limitaciones debido a que aún quedan trabajos de remate por realizar. Sin embargo, los pasos para vehículos y peatones están habilitados, lo que es especialmente importante de cara a la Semana Santa, una de las épocas más concurridas del año en Marbella.
El concejal ha pedido disculpas a los vecinos que se han visto afectados por las obras, subrayando que eran necesarias y urgentes, iniciándose inmediatamente después de las primeras lluvias del invierno. La longitud total de los trabajos ha sido de 212 metros, con una superficie de 2,345 metros cuadrados. Se han construido nuevos colectores, ocho pozos, albañales anti-ruido y dos buzones absorbentes para mejorar la captación de aguas pluviales.
Una de las mejoras más significativas ha sido la elevación de la rasante de la calzada en el punto más bajo del túnel, donde se encuentran los imbornales. Esto se ha hecho para asegurar que el agua de escorrentía pueda ser evacuada de manera eficiente, ya que anteriormente el sistema estaba en una cota inferior, lo que limitaba su capacidad de absorción.
Además, se ha ampliado el acerado en el túnel hasta un ancho de 1.5 metros, con barandillas de protección, para garantizar la seguridad de los peatones que transitan por esta área. La calzada se ha reducido a 5.5 metros, y se ha establecido que los vehículos pesados solo podrán circular en un sentido, lo que también contribuirá a mejorar la seguridad vial en la zona.
Con la llegada de la Semana Santa, la reactivación del tráfico en el túnel de Puerto Banús es un alivio tanto para los residentes como para los visitantes. Esta época del año atrae a un gran número de turistas, y la mejora en la infraestructura es un paso positivo hacia la gestión del tráfico y la seguridad en una de las áreas más emblemáticas de Marbella. Las autoridades locales continúan trabajando para garantizar que la ciudad esté preparada para recibir a todos aquellos que deseen disfrutar de sus festividades y atractivos turísticos.