El verano de 2025 ha sido testigo de una de las temporadas más devastadoras en la lucha contra incendios en España, con cerca de 400.000 hectáreas arrasadas por las llamas en un periodo de apenas 20 días. Ante esta situación alarmante, la Unidad Militar de Emergencias (UME) y los cuerpos de bomberos han intensificado sus esfuerzos, pero un nuevo aliado ha comenzado a destacar en esta batalla: los drones. Estas aeronaves no tripuladas están revolucionando la forma en que se gestionan los incendios, ofreciendo capacidades que complementan y, en algunos casos, podrían incluso reemplazar a los métodos tradicionales de extinción de incendios.
### Drones: Una Herramienta Complementaria o Sustitutiva
La utilización de drones en la lucha contra incendios plantea una pregunta crucial: ¿pueden estos dispositivos sustituir a las aeronaves tripuladas? Israel Quintanilla, experto en drones y profesor en la Universidad Politécnica de Valencia, sostiene que es viable y factible. Los drones ofrecen una visión cenital que permite a los equipos de emergencia obtener información crucial sobre la ubicación y el avance de los incendios. Equipados con cámaras térmicas, estos dispositivos pueden detectar focos de calor y su intensidad, lo que resulta esencial para la planificación de las operaciones de extinción.
Uno de los aspectos más prometedores del uso de drones es la posibilidad de coordinar múltiples unidades al mismo tiempo. Quintanilla enfatiza que, mientras un solo dron tiene limitaciones, la gestión de diez drones en conjunto puede proporcionar una visión más completa y detallada de la situación. Este enfoque colaborativo es el futuro de la lucha contra incendios, y se están desarrollando softwares avanzados en Europa para facilitar esta coordinación.
### La Tecnología al Servicio de la Emergencia
La UME ha creado la Unidad de Drones de la UME (UDRUME), que se encarga de integrar y operar estos dispositivos en situaciones de emergencia. Esta unidad no solo se centra en la operación de drones aéreos, sino que también incluye vehículos no tripulados terrestres, como el sistema P75, que es capaz de moverse en terrenos difíciles y está equipado con tecnología avanzada para la vigilancia y el reconocimiento.
Entre los drones aéreos utilizados por la UDRUME se encuentran modelos como el Mavic 2 Enterprise Advanced de DJI y el Elios 2 de Flyability, que son operados por un solo piloto. Sin embargo, también existen drones más complejos que requieren dos operadores, como el Matrice 300 de DJI y el Condor de Dronetools. Estos dispositivos son fundamentales para la vigilancia y el reconocimiento de áreas afectadas por incendios, permitiendo a los equipos de emergencia tomar decisiones informadas y rápidas.
Además de la UME, otros cuerpos de seguridad, como la Guardia Civil, han implementado el uso de drones en sus operaciones. A través del Equipo Pegaso, la Guardia Civil utiliza drones equipados con cámaras térmicas y sensores de radiación infrarroja para identificar fuentes de calor y crear mapas detallados del terreno. Esta tecnología no solo ayuda en la extinción de incendios, sino que también es útil para la búsqueda y rescate de personas en situaciones de emergencia.
### El Futuro de los Drones en la Lucha Contra Incendios
A pesar de los avances significativos en la tecnología de drones, algunos expertos creen que aún queda un camino por recorrer antes de que estos dispositivos puedan reemplazar por completo a las aeronaves tripuladas. Los aviones y helicópteros siguen siendo esenciales para la extinción de incendios, ya que pueden transportar grandes cantidades de agua, como es el caso del Bombardier CL-415, que puede llevar hasta seis toneladas.
Sin embargo, empresas como SkyFlare están trabajando en el desarrollo de helicópteros no tripulados que podrían cargar hasta 500 kg de agua. Su proyecto, conocido como Soko, busca estar operativo para el verano de 2026, y podría marcar un hito en la lucha contra incendios, especialmente durante la noche, cuando la efectividad de las operaciones se ve reducida por la falta de luz.
El CEO de SkyFlare, Antonio Bedmar González, destaca que la capacidad de operar durante la noche podría aumentar la eficiencia de las intervenciones en emergencias en un tercio. Esta innovación podría cambiar las reglas del juego en la lucha contra incendios, permitiendo que las operaciones continúen incluso cuando cae la noche.
Por otro lado, la integración de tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial y redes móviles también se considera crucial para el futuro de los drones en la lucha contra incendios. La empresa Hispasat ha desarrollado tecnologías satelitales para la prevención de incendios, lo que demuestra que la innovación en este campo está en constante evolución.
La combinación de drones, tecnología avanzada y la colaboración entre diferentes cuerpos de emergencia promete transformar la forma en que se gestionan los incendios en España. A medida que se desarrollan nuevas capacidades y se perfeccionan las existentes, es probable que veamos un cambio significativo en la eficacia de las operaciones de extinción de incendios en los próximos años.