El mercado laboral en España ha alcanzado un nuevo hito, con un total de 22,38 millones de ocupados en el tercer trimestre de 2025. Este crecimiento se ha visto impulsado principalmente por la industria y la construcción, sectores que han recuperado un número significativo de empleos tras la temporada estival. Sin embargo, a pesar de este aumento en la ocupación, la tasa de desempleo ha experimentado un ligero incremento, lo que plantea interrogantes sobre la sostenibilidad de esta recuperación y los desafíos que aún enfrenta el país.
**Crecimiento del Empleo en Sectores Clave**
Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE), la industria ha recuperado 64.000 empleos, mientras que la construcción ha sumado 32.600 nuevos puestos de trabajo. Además, el sector servicios ha contribuido con un incremento de 39.100 ocupados, lo que ha llevado a un total de 118.400 nuevos empleos generados entre julio y septiembre. Este crecimiento es notable, aunque se sitúa por debajo de los casi medio millón de empleos creados en el segundo trimestre, cuando la economía se benefició de las contrataciones estacionales del verano.
A pesar de estos avances, la población activa ha crecido a un ritmo más acelerado que la ocupación, superando los 25 millones de personas. Esto ha resultado en un aumento de la tasa de desempleo, que se ha elevado a un 10,45%. Este fenómeno es preocupante, ya que indica que, aunque se están creando empleos, la oferta de trabajo no está satisfaciendo la demanda de la población activa.
El sector privado ha sido el principal motor de este crecimiento, generando el 90% de los nuevos empleos, mientras que el sector público ha visto un incremento marginal de solo 10.800 puestos. Este dato resalta la importancia del sector privado en la economía española y su papel crucial en la creación de empleo.
**Desafíos Persistentes en el Mercado Laboral**
A pesar de los avances en la creación de empleo, el aumento del desempleo plantea serias preocupaciones. En el tercer trimestre, el número de parados aumentó en 60.100 personas, alcanzando un total de 2.613.200 desempleados. Este aumento se ha visto exacerbado por el final de las contrataciones estacionales y el crecimiento de la población activa. La situación es aún más preocupante para las mujeres, ya que el desempleo femenino ha aumentado en 82.700, mientras que el desempleo masculino ha disminuido en 22.600.
La tasa de desempleo entre las mujeres ha subido a 12,11%, lo que indica una disparidad significativa en el mercado laboral. Este fenómeno sugiere que las políticas de empleo deben ser más inclusivas y dirigidas a abordar las necesidades específicas de las mujeres en el ámbito laboral. Además, el desempleo entre los jóvenes y aquellos que buscan su primer empleo sigue siendo un desafío, con un aumento notable en la cantidad de personas que no han podido encontrar trabajo tras perder su empleo anterior.
En términos de nacionalidad, el desempleo ha aumentado entre los españoles, mientras que la población extranjera ha visto una variación mínima en sus tasas de desempleo. Esto podría indicar que los españoles están enfrentando mayores dificultades para reintegrarse al mercado laboral, lo que podría estar relacionado con la falta de habilidades demandadas en el mercado actual.
**Perspectivas Futuras y Recomendaciones**
Las proyecciones para el futuro del mercado laboral en España son mixtas. A pesar de los avances en la creación de empleo, las previsiones de organismos como Funcas sugieren que la inversión y la creación de empleo podrían verse recortadas a la mitad hasta 2027. Esto plantea un escenario complicado, donde el crecimiento del empleo podría estancarse y la tasa de desempleo podría seguir siendo elevada.
Es crucial que las políticas económicas y laborales se adapten a esta nueva realidad. Se deben implementar estrategias que fomenten la formación y la capacitación de la fuerza laboral, especialmente en sectores en crecimiento como la tecnología y la sostenibilidad. Además, es fundamental promover la igualdad de género en el mercado laboral, garantizando que las mujeres tengan las mismas oportunidades de empleo y desarrollo profesional que sus homólogos masculinos.
La colaboración entre el gobierno, las empresas y las instituciones educativas será esencial para abordar estos desafíos. Solo a través de un enfoque conjunto se podrá garantizar un mercado laboral más inclusivo y resiliente, capaz de adaptarse a las cambiantes condiciones económicas y sociales.
En resumen, aunque España ha logrado un récord en la ocupación, los desafíos que enfrenta el mercado laboral son significativos. La creación de empleo debe ir acompañada de políticas que aborden las disparidades y promuevan un crecimiento sostenible y equitativo para todos los ciudadanos.
