Un robo de cable en la línea de alta velocidad AVE entre Madrid y Sevilla ha causado un caos significativo, dejando a más de 10,700 pasajeros atrapados en 30 trenes durante varias horas. Este incidente, que se produjo en cuatro puntos diferentes de la provincia de Toledo, ha generado una serie de reacciones tanto de las autoridades como de los afectados, quienes han experimentado una situación de gran incomodidad y frustración.
La situación comenzó a desarrollarse el pasado domingo, cuando se reportaron interrupciones en el servicio ferroviario debido al robo de cable de señalización. El ministro de Transportes, Óscar Puente, confirmó que el robo afectó a los sistemas de seguridad de la línea, lo que llevó a la suspensión de la circulación de trenes. En un intento por abordar la crisis, la Guardia Civil ha iniciado una investigación para identificar a los responsables de este acto delictivo, que ha sido calificado como un sabotaje.
### Impacto en los Viajeros
Los pasajeros afectados han expresado su descontento a través de las redes sociales y en las estaciones de tren, donde se han formado largas colas mientras esperaban información sobre sus viajes. Muchos de ellos se encontraban regresando a Madrid tras el Puente de mayo o viajando a la Feria de Abril en Sevilla, lo que ha intensificado la frustración. Entre los afectados se encontraba el humorista César Cadaval, quien relató su experiencia de 14 horas atrapado en el tren, aunque intentó mantener el ánimo cantando para aliviar la tensión del momento.
La situación ha llevado a Renfe a ofrecer compensaciones a los viajeros, quienes pueden reclamar gastos de comida y alojamiento según el reglamento europeo que protege los derechos de los pasajeros de ferrocarriles. Facua-Consumidores en Acción ha recordado que, además de la devolución del importe de los billetes, las empresas están obligadas a proporcionar asistencia a los afectados, incluso en situaciones extraordinarias como esta.
### Reacciones de las Autoridades
El presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia, ha señalado que el robo de cable no solo afecta a la infraestructura ferroviaria, sino que también pone en riesgo la seguridad de los pasajeros. En su intervención, destacó que este tipo de actos delictivos son cada vez más comunes y requieren una respuesta más efectiva por parte de las autoridades. La investigación en curso busca esclarecer los detalles del robo y prevenir futuros incidentes.
Por su parte, la Junta de Andalucía ha criticado al Gobierno central por su falta de respuesta ante la crisis, acusándolo de inoperancia. La portavoz del Gobierno andaluz, Carolina España, ha instado a las autoridades a actuar con rapidez y a proporcionar explicaciones claras a los ciudadanos afectados. Esta situación ha puesto de relieve la necesidad de un plan de contingencias más robusto por parte de Renfe y Adif para manejar imprevistos de esta magnitud.
A medida que avanzaba la mañana del lunes, se reportó que el servicio ferroviario comenzaba a restablecerse, con un 70% de la operativa recuperada. Sin embargo, muchos viajeros seguían esperando en las estaciones, y las colas continuaban siendo una constante en las principales terminales del país. El ministro Puente ha asegurado que se están tomando medidas para garantizar la seguridad y la normalidad en el servicio, aunque la situación sigue siendo tensa para aquellos que aún no han podido continuar su viaje.
Este incidente no solo ha afectado a los pasajeros, sino que también ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de las infraestructuras críticas en España. La creciente ola de robos de cobre y otros materiales en las vías del tren ha llevado a las autoridades a considerar la implementación de medidas más estrictas para proteger estas instalaciones. La colaboración entre la Guardia Civil, la Policía Nacional y las empresas ferroviarias será crucial para abordar este problema y garantizar la seguridad de los viajeros en el futuro.