El mundo del rugby en Sevilla ha perdido a una de sus figuras más emblemáticas: Juan Antonio Arenas Posada. Su fallecimiento, anunciado por la Real Federación Española de Rugby y el Real Ciencias La Carloteña, ha dejado un vacío en el corazón de muchos que lo conocieron y compartieron su pasión por este deporte. Arenas no solo fue un destacado entrenador, sino también un pionero que dedicó su vida a la promoción y desarrollo del rugby en la ciudad, convirtiéndose en un referente para generaciones de jugadores y aficionados.
**Un Pionero del Rugby en Sevilla**
Juan Antonio Arenas fue el alma fundacional del Real Ciencias Rugby Club, una entidad que ha sido testigo de la evolución del rugby en Sevilla desde su creación. Desde 2024, el Campo A de La Cartuja lleva su nombre, un homenaje a su dedicación y esfuerzo por hacer crecer este deporte en la región. Su visión de que Sevilla podía albergar rugby de alto nivel fue un motor que impulsó a muchos jóvenes a unirse a este deporte, enseñándoles que el rugby no es solo un juego, sino una forma de vida que fomenta valores como el trabajo en equipo, la disciplina y el respeto.
Arenas fue un entrenador apasionado que dejó una huella imborrable en el club. Durante su mandato, el Ciencias logró conquistar varias Ligas españolas y la Copa del Rey en múltiples ocasiones, destacándose en la década de los noventa. Su estilo de juego, basado en un vistoso rugby a la mano, cautivó a los aficionados y dejó un legado que perdura hasta hoy. La comunidad del rugby en Sevilla recuerda con cariño los momentos vividos bajo su dirección, donde cada partido era una celebración del deporte y la camaradería.
**El Impacto de su Legado**
El legado de Juan Antonio Arenas va más allá de los trofeos y los logros deportivos. Su influencia se siente en cada rincón del club y en cada niño que se inicia en el rugby. El Real Ciencias Rugby Club ha expresado su profundo pesar por su partida, destacando que su pasión, entrega y compromiso están presentes en cada entrenamiento y en cada partido. La comunidad del rugby se une en un sentimiento de gratitud hacia Arenas, reconociendo que su visión y dedicación han sido fundamentales para el crecimiento del rugby en Sevilla.
La noticia de su fallecimiento ha conmovido a muchos, y se ha anunciado que durante el fin de semana, todos los partidos de rugby en España guardarán un minuto de silencio en su honor. Este gesto es un testimonio del respeto y la admiración que se le tiene, no solo en Sevilla, sino en todo el país. Arenas fue un verdadero embajador del rugby, y su contribución al deporte será recordada por generaciones.
Los restos de Juan Antonio Arenas están siendo velados en el Tanatorio SE-30, donde amigos, familiares y miembros de la comunidad del rugby se han acercado para rendir homenaje a su vida y legado. El responso se llevará a cabo en la Capilla A del tanatorio, un momento que seguramente será emotivo y lleno de recuerdos compartidos.
La figura de Juan Antonio Arenas es un recordatorio de que el deporte puede ser un vehículo para la formación de personas y la construcción de comunidades. Su vida y obra seguirán inspirando a aquellos que aman el rugby y a todos los que han tenido la fortuna de conocerlo. En cada pase, en cada ensayo y en cada partido, su espíritu vivirá en el corazón de quienes continúan su legado en el campo de juego. El rugby en Sevilla ha perdido a un gran líder, pero su influencia perdurará en cada jugador que se vista con la camiseta del Real Ciencias, recordando siempre la pasión y el amor que Arenas tenía por este deporte.