La historia de Felipe Palagani, un niño de Neuquén, es un testimonio conmovedor de la lucha por la vida y la importancia de la donación de órganos. Después de 13 meses de internación en el Hospital Italiano de Buenos Aires, Felipe recibió el alta médica tras un trasplante de corazón que marcó un hito en la medicina argentina. Este procedimiento, realizado el 18 de junio de 2025, fue el primero en el país bajo la modalidad de donación en asistolia controlada en un paciente pediátrico, lo que representa un avance significativo en la forma en que se llevan a cabo los trasplantes en Argentina.
La historia de Felipe comenzó el 20 de mayo de 2024, cuando nació con una miocardiopatía dilatada severa. Desde sus primeros meses de vida, su familia se enfrentó a la dura realidad de que necesitaba un trasplante urgente. Su madre, Pamela Domínguez, recuerda esos momentos como un desafío constante, lleno de incertidumbre y esperanza. Durante su internación, Felipe experimentó paros cardíacos y otros momentos críticos, pero su familia nunca perdió la fe. «Siempre pensé que iba a llegar. No me permitía pensar en otra cosa», compartió Pamela, reflejando la determinación de una madre que se niega a rendirse.
El trasplante de corazón fue posible gracias a la generosidad de otra familia neuquina, los Zarragud, quienes decidieron donar los órganos de su hijo Luca, un niño de dos años que también había estado internado en el mismo hospital. La conexión entre las dos familias se forjó en las largas jornadas de espera y la incertidumbre compartida. Ambas familias se unieron en un lazo de solidaridad, compartiendo momentos de alegría y tristeza en un entorno que, aunque hospitalario, se convirtió en un espacio de esperanza.
### La Innovación en la Donación de Órganos
El trasplante de Felipe no solo representa un nuevo comienzo para él y su familia, sino que también marca un avance en la medicina trasplantológica en Argentina. La donación en asistolia controlada, que fue habilitada en el país en 2023, permite que los órganos sean extraídos de donantes que han fallecido por paro cardíaco irreversible, en lugar de muerte cerebral. Este cambio en la normativa ha abierto nuevas oportunidades para salvar vidas, especialmente en el caso de pacientes pediátricos.
El doctor Jorge Barretta, jefe de cirugía cardiovascular y trasplante pediátrico del Hospital Italiano, explicó que el corazón de Luca estuvo parado solo 30 minutos antes de ser evaluado y considerado apto para el trasplante. Este procedimiento no solo es innovador, sino que también reduce drásticamente el tiempo disponible para la ablación y el trasplante, lo que puede ser crucial en situaciones de emergencia.
La asignación del órgano a Felipe se basó en su posición en la lista nacional del INCUCAI y su compatibilidad, lo que subraya la importancia de un sistema organizado y eficiente para la donación de órganos en el país. Este trasplante no solo salvó la vida de Felipe, sino que también ha inspirado a otros a considerar la donación de órganos como una opción viable y necesaria.
### La Importancia de la Concientización sobre la Donación de Órganos
La historia de Felipe y Luca ha resonado en la sociedad argentina, convirtiéndose en un símbolo de la importancia de la donación de órganos, especialmente en el ámbito pediátrico. Durante su internación, Pamela se dedicó a concientizar sobre la donación, utilizando su experiencia para hablar en medios de comunicación, hospitales y redes sociales. Su objetivo era claro: mostrar que la vida de su hijo dependía de la decisión de otra familia de decir «sí» a la donación.
«Quería mostrar que mi hijo tenía una oportunidad de vida, y que esa oportunidad no dependía de nosotros, sino de una familia que dijera que sí», afirmó. Su testimonio ha inspirado a muchas personas y ha ayudado a visibilizar la necesidad de aumentar la donación pediátrica en Argentina. La familia Palagani continúa su vida cerca del Hospital Italiano, donde Felipe recibe controles médicos regulares, mientras esperan regresar a su hogar en Neuquén.
El impacto social y médico del trasplante ha sido reconocido por profesionales y autoridades, quienes ven en este caso un ejemplo de cómo la donación de órganos puede cambiar vidas. La historia de Felipe y Luca no solo es una narrativa de esperanza, sino también un llamado a la acción para que más personas se informen y consideren la donación de órganos como una forma de ayudar a quienes lo necesitan.
El 14 de octubre, en el Día Mundial de la Donación de Órganos, la familia Palagani compartió una emotiva publicación en redes sociales, recordando el camino recorrido y agradeciendo a la familia Zarragud por su generosidad. «Detrás de cada trasplante hay dos historias que se entrelazan: una que parte, y otra que sigue. Una que enseña que el amor no termina cuando el cuerpo se apaga», expresaron, resaltando la importancia de la donación y el impacto que puede tener en la vida de otros.
Felipe ha vuelto a casa, donde vive, juega y ríe, agradeciendo cada día por la nueva oportunidad que le ha sido brindada. Su historia es un recordatorio de que, a pesar de los momentos más oscuros, siempre hay espacio para la esperanza y la vida. La donación de órganos no solo salva vidas, sino que también une a las familias en un acto de amor y solidaridad que trasciende la tragedia.