La reciente disminución de los incentivos fiscales para los planes de pensiones en España ha generado un impacto significativo en el ahorro y la inversión de los ciudadanos. Desde 2021, el límite de aportación a estos planes se ha reducido drásticamente, lo que ha llevado a una disminución notable en el volumen de aportaciones brutas. Según datos de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensión (Inverco), entre 2021 y 2024, los ahorradores han recortado sus aportaciones en más de 9.800 millones de euros. Este cambio ha suscitado preocupaciones sobre la viabilidad futura de los planes de pensiones individuales, que podrían estar en peligro de extinción.
La reducción de los límites de aportación ha sido progresiva. Inicialmente, el límite se estableció en 8.000 euros anuales, pero se redujo a 2.000 euros en 2021 y posteriormente a 1.500 euros en 2022. Esta serie de recortes ha llevado a una disminución del 75% en los incentivos fiscales disponibles para los ahorradores, lo que ha desincentivado la inversión en estos productos financieros. A cierre de abril de 2025, el patrimonio de los planes de pensiones individuales se había reducido en 842 millones de euros respecto al mes anterior, alcanzando un total de 89.600 millones de euros, lo que representa una caída de 2.498 millones en comparación con el año anterior.
La volatilidad en los mercados financieros ha sido otro factor que ha contribuido a esta disminución. La incertidumbre económica ha llevado a muchos ahorradores a retirar su capital de los planes de pensiones, especialmente ahora que tienen la posibilidad de rescatar sus fondos acumulados sin penalización, siempre que las aportaciones tengan más de diez años de antigüedad. Esta nueva normativa ha abierto una ventana de liquidez que muchos partícipes esperaban desde que se anunciaron los recortes en los beneficios fiscales.
La situación se complica aún más al considerar que, a pesar de que los planes de pensiones individuales han mostrado rentabilidades positivas en el último año, estas no son suficientes para contrarrestar la pérdida de patrimonio. La rentabilidad media de los planes de pensiones se ha situado en un 3,7%, mientras que algunos fondos de inversión han superado este porcentaje, lo que ha llevado a los ahorradores a reconsiderar sus opciones de inversión.
### Rentabilidad y Sostenibilidad de los Planes de Pensiones
A pesar de la caída en el patrimonio, los planes de pensiones individuales han logrado mantener rentabilidades positivas en todos los plazos. En particular, la categoría de Renta Fija Largo Plazo ha alcanzado un rendimiento del 4,9%, y a cinco años, la Renta Variable ha superado el 11% de rentabilidad media anual. Sin embargo, la percepción general entre los ahorradores es que estos productos no son rentables, lo que ha llevado a una disminución en la confianza hacia los planes de pensiones.
Expertos en el sector, como Enrique Borrajeros, han señalado que, aunque existen planes de pensiones rentables y consistentes a largo plazo, muchos ahorradores no están invirtiendo en ellos. Esto se debe a que, a menudo, se centran en los beneficios fiscales inmediatos en lugar de considerar sus objetivos de jubilación a largo plazo. Esta falta de planificación puede costar a los ahorradores entre 2 y 3 puntos de rentabilidad en periodos de diez años, lo que subraya la importancia de una estrategia de inversión bien pensada.
La secretaria general de la Organización de Consultores de Pensiones (Ocopen), Isabel Casares, ha advertido que los planes de pensiones individuales están en riesgo de desaparecer. A pesar de ofrecer rentabilidades positivas, la reducción de los incentivos fiscales y la creciente competencia de otros productos de inversión están erosionando su base de clientes. Casares ha afirmado que la situación es crítica y que, si no se toman medidas para revitalizar el interés en los planes de pensiones, su desaparición podría ser inminente.
La combinación de la reducción de aportaciones, la volatilidad del mercado y la falta de incentivos fiscales ha creado un entorno desafiante para los planes de pensiones en España. Los ahorradores deben ser conscientes de las implicaciones de sus decisiones de inversión y considerar la diversificación de sus carteras para asegurar un futuro financiero más estable. La educación financiera y la planificación a largo plazo son esenciales para navegar en este panorama cambiante y garantizar que los ciudadanos estén preparados para su jubilación.