En un reciente congreso de la asociación AECOC celebrado en Valencia, Juan Roig, presidente de Mercadona, compartió sus perspectivas sobre la responsabilidad empresarial y la gestión de impuestos. Durante su intervención, Roig enfatizó que pagar impuestos no debería ser visto como un problema para los empresarios, sino como una obligación que debe ser gestionada adecuadamente por las autoridades. Esta declaración ha generado un amplio debate sobre el papel de los empresarios en la sociedad y la importancia de la gestión pública de los recursos.
Roig, conocido por su enfoque pragmático y su compromiso con la responsabilidad social, instó a los empresarios a ser referentes en la sociedad. «No es un problema para un empresario pagar muchos impuestos, nos sentimos orgullosos de hacerlo, pero luego los demás los tienen que saber gestionar», afirmó. Esta declaración resuena en un contexto donde la presión fiscal sobre las empresas es un tema recurrente en el debate político y social.
### La Importancia de la Gestión de Recursos Públicos
La gestión de los impuestos recaudados es un aspecto crucial que, según Roig, debe ser abordado con seriedad. En su discurso, destacó que, aunque los empresarios deben contribuir al bienestar social a través de sus impuestos, es fundamental que estos recursos sean utilizados de manera eficiente y transparente. La falta de confianza en la gestión pública puede llevar a una percepción negativa sobre el pago de impuestos, lo que a su vez puede afectar la disposición de los empresarios a cumplir con sus obligaciones fiscales.
Roig también hizo hincapié en la necesidad de que los empresarios se cuestionen sobre lo que pueden aportar a la sociedad. «En lugar de pensar en lo que España puede hacer por nosotros, debemos preguntarnos qué podemos hacer nosotros por España», sugirió. Esta reflexión invita a un cambio de mentalidad que podría fomentar una mayor colaboración entre el sector empresarial y el gobierno, así como un compromiso más fuerte con el desarrollo social y económico del país.
El presidente de Mercadona también recordó el impacto de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que afectó a Valencia en octubre de 2024. Roig expresó su desamparo durante esa crisis, pero también destacó la solidaridad de la comunidad, que se unió para ayudar a los afectados. Esta experiencia le inspiró a crear el movimiento «Alçem-se», que proporcionó ayudas a empresarios para reabrir sus negocios tras la catástrofe. Este tipo de iniciativas demuestra cómo los empresarios pueden jugar un papel activo en la recuperación y el fortalecimiento de la comunidad.
### La Visión de Futuro de Mercadona
En su intervención, Roig también compartió su visión sobre el futuro de Mercadona y los desafíos que enfrenta la empresa. Uno de los principales objetivos es continuar con la expansión en Portugal, un mercado que, según él, no se está tratando con la atención que merece. Además, Roig mencionó la importancia de adaptarse a las nuevas tendencias de consumo, como el aumento de la demanda de productos listos para comer.
«A mitad de siglo, no habrá casi cocinas en las casas», predijo Roig, sugiriendo que la evolución de la tecnología y los cambios en los estilos de vida están transformando la forma en que las personas consumen alimentos. Esta afirmación resalta la necesidad de que las empresas se adapten a las nuevas realidades del mercado y busquen innovar en sus ofertas para satisfacer las necesidades cambiantes de los consumidores.
Roig también subrayó la importancia de mantener un equilibrio en la cadena de suministro, asegurando que todos los actores, desde los proveedores hasta los clientes, sean considerados en la toma de decisiones. «La misión de una empresa es satisfacer, por este orden, al jefe (cliente), trabajador, proveedor, sociedad y capital», explicó. Esta jerarquía refleja su enfoque centrado en el cliente, donde la satisfacción del consumidor es la prioridad máxima.
En resumen, las declaraciones de Juan Roig en el congreso de AECOC no solo abordan la cuestión del pago de impuestos, sino que también invitan a una reflexión más profunda sobre la responsabilidad social de los empresarios y la necesidad de una gestión pública eficaz. Su llamado a la acción para que los empresarios se conviertan en referentes en la sociedad y contribuyan al bienestar común es un mensaje que resuena en un momento en que la colaboración entre el sector privado y público es más crucial que nunca.