La reciente catástrofe provocada por la dana en Valencia ha desatado un intenso debate político en la comunidad. La delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, ha exigido al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, que explique su actuación durante el desastre que dejó 228 fallecidos. Bernabé ha instado a Mazón a responder «con dignidad» sobre lo que hizo el 29 de octubre, en lugar de utilizar la maquinaria del Partido Popular para criticarla.
La situación se ha vuelto más tensa a medida que Bernabé ha señalado que la gestión de la Generalitat fue una «calamidad». Según ella, la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) proporcionó información constante sobre la situación, mientras que la Generalitat no activó los protocolos de emergencia a tiempo. Bernabé ha criticado que el Cecopi, el centro de coordinación de emergencias, no se convocara hasta las cinco de la tarde del día del desastre, a pesar de que se había activado el Plan Especial de Inundaciones días antes.
La delegada ha subrayado que la falta de acción por parte de Mazón y su equipo ha llevado a una situación en la que el Gobierno de España ha tenido que asumir la responsabilidad de la reconstrucción, transfiriendo ya 5.000 millones de euros de los 16.500 millones prometidos. En este contexto, Bernabé ha afirmado que la Generalitat está «secuestrada» por Mazón, quien debería estar trabajando en la recuperación de la provincia en lugar de defenderse de las críticas.
Bernabé ha insistido en que la ciudadanía está demandando respuestas y que la falta de acción de Mazón en el día de la dana es inaceptable. La delegada ha recordado que Mazón tiene la oportunidad de declarar ante la jueza que investiga la gestión del desastre, pero hasta ahora ha optado por no hacerlo. «Es mucho más fácil ir y declarar que opinar desde la distancia», ha afirmado Bernabé, quien ha mantenido que su versión de los hechos ha sido consistente desde el principio.
La situación se complica aún más con las acusaciones de manipulación de información por parte del Partido Popular. Bernabé ha denunciado que el PP ha estado distorsionando sus declaraciones y que la falta de claridad en la gestión de la Generalitat ha llevado a confusiones y contradicciones. La delegada ha señalado que la única pregunta sin respuesta es qué hizo Mazón durante las horas críticas del desastre, y ha instado a que se aclare su papel en la crisis.
La gestión de la emergencia ha sido objeto de críticas no solo por la falta de acción, sino también por la forma en que se comunicó la información a la población. Bernabé ha afirmado que la Generalitat tenía acceso a datos cruciales desde horas antes del desastre, pero no los compartió adecuadamente. Esto ha llevado a una falta de preparación y a una respuesta inadecuada ante la emergencia.
La situación ha generado un clamor popular pidiendo la dimisión de Mazón, quien, según Bernabé, tenía la máxima responsabilidad y no actuó en consecuencia. La delegada ha enfatizado que la justicia está señalando cada vez más a la Generalitat por su falta de acción y que la ciudadanía merece respuestas claras y responsables.
En medio de esta crisis, la gestión del PP ha sido cuestionada, y la falta de transparencia en la comunicación ha dejado a muchos ciudadanos frustrados. La situación actual plantea interrogantes sobre la capacidad de la Generalitat para manejar emergencias y la necesidad de una revisión de los protocolos existentes para evitar que tragedias como esta se repitan en el futuro. La presión sobre Mazón y su equipo continúa aumentando, y la demanda de rendición de cuentas se hace cada vez más fuerte en la comunidad valenciana.