La oferta pública de adquisición (OPA) lanzada por BBVA sobre Banco Sabadell ha generado un intenso debate en el ámbito financiero español. A medida que la operación avanza, surgen múltiples interrogantes sobre su viabilidad y las implicaciones que tendría para el sector bancario. La OPA, considerada hostil por muchos, ha encontrado resistencia no solo entre los accionistas de Sabadell, sino también entre partidos políticos y sindicatos, quienes advierten sobre los posibles efectos negativos en el empleo y la concentración del mercado bancario.
### La Oferta y su Recepción en el Mercado
BBVA ha propuesto una oferta que incluye 0,70 euros en efectivo más una acción del banco vasco por cada 5,3456 acciones de Sabadell. Sin embargo, esta valoración ha sido considerada insuficiente por muchos analistas. Actualmente, la acción de Sabadell cotiza por encima de la oferta de BBVA, lo que sugiere que el mercado anticipa una mejora en los términos de la OPA. Antonio Castelo, analista de iBroker, señala que los accionistas de Sabadell podrían obtener un mayor beneficio vendiendo sus acciones en el mercado abierto en lugar de aceptar la oferta de BBVA.
La prima negativa del -2% que representa la oferta de BBVA ha suscitado dudas sobre la capacidad del banco vasco para atraer a los accionistas de Sabadell. Nuria Álvarez, analista de Renta 4 Banco, también comparte esta preocupación, afirmando que el éxito de la operación depende de una mejora en la oferta. Sin un incentivo económico más atractivo, es probable que los accionistas no acudan en número suficiente para que la OPA prospere.
### Estrategias para Aumentar la Atractividad de la OPA
Para que la OPA tenga éxito, se estima que BBVA debería aumentar su oferta entre un 10% y un 15%. Esto podría implicar un ajuste en la relación de canje de acciones o la inclusión de un componente en efectivo. Castelo sugiere que un precio más atractivo, en torno a los 2,70 o 2,72 euros por acción, podría aumentar el interés por la propuesta sin comprometer la posición financiera de BBVA.
A pesar de las presiones del mercado, el CEO de BBVA, Onur Genc, ha dejado claro que no se prevé una mejora en la oferta. Sin embargo, algunos analistas creen que esta postura podría cambiar, dado que BBVA cuenta con un exceso de capital que le permitiría ajustar la oferta sin afectar significativamente sus ratios financieros. Sin embargo, cualquier mejora podría tener un impacto negativo en el precio de las acciones de BBVA, complicando aún más la decisión.
Por otro lado, Javier Cabrera, analista de XTB, es escéptico sobre la posibilidad de que BBVA mejore su oferta. Argumenta que el banco ya ha asumido compromisos con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que podrían perjudicar la rentabilidad de la operación. Si BBVA decide aumentar el precio de la OPA, el impacto positivo que esperaba podría verse reducido, lo que disminuiría el atractivo de la operación.
### Implicaciones Políticas y Regulatorias
El futuro de la OPA también está condicionado por factores políticos y regulatorios. La aprobación de la CNMC es un paso clave, pero la decisión del Gobierno, que aún está pendiente, podría imponer condiciones adicionales que compliquen la operación. El Ministerio de Economía tiene un plazo de 15 días para decidir si eleva la resolución de la CNMC al Consejo de Ministros, que a su vez tendrá 30 días para aprobar la operación.
Los expertos advierten que la postura del Gobierno podría ser negativa, lo que complicaría aún más la situación. Castelo menciona que, a pesar de la aprobación de la CNMC, el Gobierno podría no estar dispuesto a permitir la OPA por razones políticas. Esto plantea un escenario incierto para los accionistas de Sabadell, quienes podrían verse obligados a decidir sobre la OPA sin un marco claro.
La incertidumbre sobre el resultado del periodo de aceptación persiste, especialmente dado que la ecuación de canje no ofrece prima y la estructura accionarial de Sabadell incluye un alto porcentaje de accionistas minoristas que pueden no tener incentivos suficientes para aceptar la oferta. La situación se complica aún más con la posibilidad de que el Gobierno imponga condiciones que limiten la capacidad de BBVA para llevar a cabo la operación.
En resumen, la OPA hostil de BBVA sobre Banco Sabadell se encuentra en un punto crítico, donde la estrategia de la entidad vasca, la respuesta de los accionistas y las decisiones políticas jugarán un papel fundamental en el desenlace de esta operación que podría transformar el panorama bancario en España.